EconomiaInforma

 

Economia Informa No. 346. (Mayo-junio 2007)

Presentación (Continuación)

 

La Facultad de Economía no está aislada del mundo y ha de responder a su evolución. Amén del marco general arriba esbozado, el ascenso numérico y cualitativo de las universidades privadas y las exigencias de un mercado laboral de precaria expansión han conducido, igualmente, al establecimiento de nuevos ámbitos de docencia e investigación que enfocan con mayor esmero las exigencias no sólo técnico-formales de los economistas sino también la temática de la ecología y su importancia para el marxismo en su perfil académico o en su cariz político. Lejos ya de aquellas tropelías –del tipo “las matemáticas son burguesas”– que alguna vez trataron de cobijarse en nuestros auditorios (no en nuestras aulas, por fortuna), varios de quienes sostienen hoy la enseñanza del marxismo están tratando de fecundarlo, como se dijo, con la problemática ecológica y con herramientas cuantificadoras modernas.


Es en ese esfuerzo colectivo de renovación intelectual de nuestra comunidad en el que se inserta el presente número de Economía Informa, teniendo siempre en mente que dicho propósito sería mucho más difícil si no se contase tanto con la libertad de cátedra vigente (la cual muchas veces se da simplemente por descontada) como con el sedimento del profesorado precursor en tópicos marxistas: Sergio de la Peña, Pedro López Díaz, Ruy Mauro Marini, Bolívar Echeverría, Alberto Spagnolo, Enrique Semo, René Zavaleta, Alejandro Dabat, Antonio García de León, Francisco Omar Lerda, Alejandro Álvarez, entre otros muchos –y al margen de los caminos que cada uno haya emprendido después–. La veta por nosotros elegida fue la del filósofo marxista español Manuel Sacristán Luzón, cuyo trabajo, a pesar de su incesante actividad contra la dictadura franquista, tiene un rigor, una erudición y una coherencia ético-política que le sitúan como uno de los últimos marxistas clásicos a la inverosímil altura de la segunda mitad del siglo xx.


La obra escrita de Manuel Sacristán Luzón, asequible no en alemán o en inglés –que por ello fuera de difícil trato para algunos– sino en un prístino y muy disfrutable castellano, se conoció prologando, traduciendo y compilando numerosos textos de la cultura socialista y del positivismo lógico antes de que Sacristán estuviera entre nosotros como profesor de la unam en los años ochenta. Siempre traduciendo y estudiando críticamente a Georgy Lukács, a quien admiraba, pero sobre todo en la línea de Labriola y Antonio Gramsci sobre la filosofía de la praxis, no promovió al marxismo como un curso de currícula universitaria sino como una síntesis de filosofía, economía y política, síntesis orientada y vitalizada por el movimiento obrero. Por eso estuvieron siempre lejos de él los intentos de presentar un enfoque del siglo xix, por más multiabarcante que fuese, como “la verdadera ciencia social contemporánea”, que por construcción sería superior a cualquier teoría económica, como la del mainstream de la Academia anglosajona: simplemente carecía de sentido epistemológico y político reducir la complejidad de una vigorosa tradición revolucionaria a mera economía política o a su crítica. De ahí también su temprana asimilación de la problemática ecologista.


•••••

Los ensayos que conforman el presente número de Economía Informa son fruto de una serie de discusiones que se agruparon bajo el rótulo de Marxismo, economía y ecología. Seminario sobre algunos aportes de Manuel Sacristán Luzón, teniendo como responsable a Hugo Contreras Sosa por parte del Seminario de Credibilidad Macroeconómica de nuestra Facultad. El programa de trabajo se integró, como es usual, por un temario, un orden de lecturas y un paquete de referencias bibliohemerográficas, a fin de estudiar, con una perspectiva académica, la manera como se articulan –desde la epistemología y desde la política– las tres vertientes de reflexión que dieron título al seminario (por lo cual las hipótesis de trabajo substantivas no serían de índole primariamente empírica sino analítica). El eje intelectual para dicho propósito lo constituyó, como queda dicho, la obra del filósofo marxista español Manuel Sacristán, quien desarrolló al respecto una clarificación gnoseológica que bien puede considerarse, en cierto sentido, como definitiva.


En la búsqueda de fidelidad para con una obra de tal magnitud (traduttore traditore), el colectivo decidió, en esta ocasión, operar con largas citas del hombre. Y en esa idea Monserrat Romero, en su artículo “Sobre el marxismo, la economía y las metodologías”, revisa el vínculo que existe entre el marxismo y las ciencias, con énfasis en las sociales y en específico en la economía. En el primer apartado se estudia, desde la concepción epistemológica de Manuel Sacristán, cómo operan el marxismo y la ciencia para la comprensión de la realidad, la diferencia entre el “método” y la “metódica”, así como algunos de los elementos científicos existentes en la obra de Karl Marx. En el segundo apartado se desarrolla el papel de la dialéctica, la economía y la perspectiva que se tiene de las ciencias sociales, utilizando sus dos tradiciones: la naturalista y la historicista. El artículo concluye con algunos comentarios personales.


Los artículos de Arturo Osorio y de Carlos López Morales recuperan el entrecruzamiento de marxismo y ecologismo. “¿Conduciría la restricción ecológica a un comunismo homeostático?” es el título del artículo de Arturo Osorio, en cuyo primer apartado se examinan las nociones marxianas de “comunismo”; en el segundo se da cuenta de las reformulaciones posteriores que ha experimentado esta visión, haciendo especial hincapié en la concepción comunista sin crecimiento de Wolfgang Harich, a propósito de la restricción ecológica. En este tenor, en la tercera sección se agrupan algunas opiniones políticas de la reformulación capitalista ante la eventual hecatombe climática, reformulación que involucra a políticos, científicos, organizaciones internacionales y, desde luego, empresas transnacionales. De punta a punta el texto se despliega mediante los planteamientos de Marx a la luz del trabajo de Sacristán.


En el ensayo de Carlos López Morales, que se llama “Ecología política y tradición marxista: las consideraciones analíticas y programáticas de Manuel Sacristán”, se realiza una discusión de algunos de los aspectos ecológicos de la obra del filósofo español, pues al tiempo que plantean lo que él llama “los atisbos ecológicos” de los clásicos de la tradición marxista, estimula la revisión del programa emancipatorio a la luz de resultados relevantes de la ciencia contemporánea. Se trabajan estos asuntos con una acentuación analítica, en la primera parte, y en la segunda se lleva a cabo con un énfasis programático, pues ambos son infaltables en la tradición marxista. Finalmente, se presentan algunas ideas de cierre respecto a la posible fundamentación de una ecología política en el planteamiento expuesto.


De vuelta a la relación de la economía con el marxismo, el trabajo de Hugo Contreras se rotula “El proyecto emancipatorio y el modelo macrodinámico” e intenta una reconsideración del sentido y de la vigencia de la obra de Karl Marx y Friedrich Engels, teniendo como hilo conductor el enfoque epistemológico que sobre tal asunto desarrolló Manuel Sacristán. En lo que respecta al “sentido” se trata de examinar los tipos de fundamentación que se han enfatizado para vertebrar al marxismo en cuanto proyecto emancipatorio moderno, y de eso se ocupa la primera sección del trabajo; en lo que respecta a la “vigencia” se trata de revisar el modelo macrodinámico marxengelsiano a la luz de algunos desarrollos teóricos y políticos inexistentes en el siglo xix, lo cual se aborda en la segunda sección. En las conclusiones se resumen las ideas principales expuestas a lo largo de las páginas precedentes.


El quinto artículo, de Miguel A. López Zúñiga, “Manuel Sacristán Luzón: una vida vinculada al marxismo”, está enfocado a una revisión de carácter divulgatorio de la obra de Manuel Sacristán, en cuanto filósofo marxista ejemplar y uno de los más importantes del siglo xx. Para ello, se presentan dos incisos: en el primero se desarrolla una síntesis biográfica de las diferentes etapas y momentos más destacados por los que Sacristán pasó a lo largo de su vida, y en el segundo se hace referencia al conjunto de peculiaridades dentro de su trabajo intelectual como marxista, destacando sus aportaciones al propio marxismo y a otros temas de relevancia.


Por último, hemos de agradecer la aceptación del profesor José de Jesús Rodríguez Vargas para comentar y contextualizar los trabajos del seminario en homenaje a Sacristán. Su documento se denomina “Sobre el marxismo y la economía burguesa. Comentario a las ponencias del Seminario”. A buen seguro, su estilo coloquial y polémico llamará la atención de los lectores.


•••••

Para algunos pudiera resultar curioso que el Seminario de Credibilidad Macroeconómica, que en fecha reciente presentó un número sobre expectativas endógenas en macroeconomía, vire ahora hacia la temática marxista, pero ello no es más que fruto del ejercicio de la pluralidad que caracteriza a la comunidad de la Facultad de Economía, porque a final de cuentas este número sobre marxismo, economía y ecología es una muestra a la mano de que es posible mantener viva –también en ambientes universitarios– la discusión del ideal emancipatorio característico de la tradición marxista, sin que esa discusión deba ser dogmática, no racionalista o desdeñosa para con las técnicas formales. E incluso mantenerla sin otra pretensión que seguir allanando el camino, aunque tan sólo sea el que hay que recorrer con la cabeza, como dijeraManolo Sacristán.


Hugo J. Contreras Sosa

 

Regresa >>

 
© 2007 Facultad de Economía UNAM | Webmaster | UNAM | Facultad de Economía | Contacto